
La obesidad tradicionalmente se define como un estado de desequilibrio entre la ingesta calórica y la actividad física, y no como una verdadera enfermedad. Pero es la causante directa de numerosas enfermedades, llegando a ser la principal causa de muerte a nivel mundial.
Su elevada incidencia en la población se atribuye a malos hábitos alimentarios y escasa actividad física. El desorbitado aumento que ha experimentado en las últimas tres décadas ha conducido a reevaluar sus causas porque es imposible explicar este aumento únicamente por cambios en el estilo de vida.
Se consideran cinco factores implicados en el desarrollo de la obesidad: metabólicos, hormonales, sociales, culturales y genéticos. Existe mucha controversia en los argumentos de la comunidad ...